¿Las plantas de tomate necesitan sol todo el día?

Los tomates son un cultivo de clima cálido que requieren pleno sol, lo que significa seis o más horas de sol por día. Los tomates se benefician de la exposición a la mayor cantidad de sol posible. Esto significa que la selección del sitio para sus plantas de tomate es clave. Antes de plantar sus tomates, observe el jardín a lo largo del día. A medida que el sol se mueve por el cielo, algunas áreas estarán a la sombra, mientras que otras no. Los jardines rodeados de árboles o estructuras pueden no obtener suficiente exposición al sol para cultivar plantas de tomate de manera adecuada.

Adaptación de trasplantes

Aunque los tomates requieren una gran cantidad de sol, los nuevos trasplantes deberán ser endurecidos antes de que puedan exponerse a pleno sol en el jardín. Deje sus trasplantes afuera por unas horas cada día en la mañana y aumente la cantidad de horas por día en el transcurso de una semana. Plante sus trasplantes después de este período de endurecimiento. Verifique la humedad del suelo diariamente durante el período de endurecimiento, ya que los pequeños recipientes en los que se realizan los trasplantes no retienen mucha agua, y gran parte se perderá por la evaporación.

La luz del sol y la retención de humedad

Además del sol y el calor, los tomates necesitan humedad. En días soleados de primavera y verano, la pérdida de humedad debido a la evaporación puede ser perjudicial para el crecimiento y la producción de fruta de su planta de tomate. Extienda el mantillo alrededor de la base de sus plantas para reducir este tipo de pérdida de humedad. Controle la humedad del suelo a lo largo del día a medida que aumentan las temperaturas. En el punto álgido de la producción de tomate, durante los días calurosos y soleados de verano, es posible que los tomates deban regarse diariamente. Esto es especialmente cierto para los tomates cultivados en contenedores.

Bronceado

Las frutas expuestas a la luz solar directa, ya sea como resultado de la pérdida de hojas o simplemente debido a su ubicación en la planta, son vulnerables a las quemaduras solares. Las frutas en el lado occidental de una planta pueden ser particularmente susceptibles a esto debido a la intensidad del sol de la tarde. Las quemaduras de sol en un tomate tomarán la forma de un punto suave blanco o de color claro en la piel del tomate en el lado de la fruta que mira hacia el cielo. Proteger sus plantas de insectos defoliadores como gusanos protegerá a los tomates de las quemaduras solares. Revise sus plantas regularmente para detectar estas plagas grandes y verdes. Escoja cualquier gusano que vea y ahóguelos en un cubo, o córtelos por la mitad.

Áreas cubiertas o costeras

Las áreas costeras con episodios frecuentes de tiempo nublado no siempre son adecuadas para cultivar tomates. Las plantas en estas áreas pueden producir bajos rendimientos, o frutas blandas, si producen en absoluto. Si usted es un jardinero serio y está decidido a cultivar tomates en un lugar menos que ideal, puede tener cierto éxito con variedades de tomate de estación corta, como "Stupice" y "Early Girl".

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