Pagar la deuda hipotecaria vs. Asumir una nueva hipoteca

Comprar una casa o propiedad generalmente implica sacar una hipoteca. Algunos expertos creen que existen beneficios tanto financieros como psicológicos para pagar la deuda hipotecaria, mientras que otros defienden las ventajas asociadas con asumir una nueva hipoteca a una tasa de interés más baja. Es importante medir las consecuencias asociadas con cada opción antes de decidir cuál es la mejor para su situación financiera.

Pagando la Deuda Hipotecaria: Pros

Pagar la deuda hipotecaria es ideal si desea acelerar la amortización de la hipoteca y reducir el interés pagado durante la vigencia del préstamo. La cantidad que ahorre depende de cuánto destine al reembolso del principal. Mientras más dinero se deposite en el capital de un préstamo hipotecario, más pronto se amortizará la hipoteca. Este enfoque también beneficia a los propietarios que desean deshacerse de la deuda hipotecaria antes o en el momento previsto de la jubilación. Pagar la deuda hipotecaria finalmente elimina el seguro hipotecario privado, también.

Pagar la deuda hipotecaria: Contras

Si elige pagar la deuda hipotecaria existente, podría haber consecuencias impositivas, como una reducción o pérdida de la deducción de intereses hipotecarios al presentar declaraciones de impuestos federales. Además, el efectivo que usaría para pagar la hipoteca podría ser de mejor uso para cancelar deudas con intereses más altos. Por ejemplo, si tiene una hipoteca con un interés del 5 por ciento y una deuda con una tarjeta de crédito que cobra un interés del 14 por ciento, tiene más sentido colocar su efectivo adicional para la deuda con la tasa de interés más alta. Lo mismo ocurre si puede invertir el dinero extra para obtener mejores rendimientos en las cuentas con mayor interés.

Asumiendo una nueva hipoteca: Pros

Los propietarios que refinancian su hipoteca actual y asumen una nueva lo hacen porque quieren acortar el plazo de la hipoteca y / o reducir sus pagos. La reducción de los pagos de la hipoteca resulta en un mayor flujo de efectivo, lo que facilita la inversión, el ahorro o la aplicación del efectivo para otras necesidades. Asumir una nueva hipoteca con un plazo más corto puede aumentar el pago de la hipoteca pero disminuir el interés total pagado durante la vigencia del préstamo.

Asumiendo una nueva hipoteca: Contras

Si el plazo es más largo que lo que queda en su antigua hipoteca, una nueva hipoteca podría extender el tiempo requerido para pagar la deuda. Si le quedan 15 años de su hipoteca anterior y asume una nueva hipoteca con un plazo de 30 años, está agregando otros 15 años de amortización, que podrían extenderse a sus años de jubilación. Además, los costos de cierre asociados con el asumir una nueva hipoteca, que deben pagarse por adelantado o incorporarse a la nueva hipoteca, podrían superar el beneficio de una tasa de interés reducida.

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